La Vida en la Naturaleza y al Aire
Libre forma parte de cada uno de los períodos de nuestra vida y se caracteriza
por incluir en cada uno, una gran variedad de juegos y trabajos físicos
realizados o a realizar en el medio natural para aprovecharlo y
disfrutarlo, siempre desde una actitud de cuidado y preservación.
Por eso desde la cátedra, proponemos
actividades y prácticas para que los alumnos "vivan" estas
experiencias, se apropien del medio y se sientan parte de él. Apropiarse
del medio ambiente natural implica aprender a desempeñarse en él, desarrollar
habilidades básicas y técnicas específicas que les permitirán conocerlo, disfrutarlo,
cuidarlo y respetarlo.
La Vida en la Naturaleza y al Aire
Libre, prepara el terreno para la educación ambiental, sus cuidados,
preservación y fomentando actitudes y aptitudes para disfrutar de la naturaleza
y vivir en ella. A la vez, las actividades en la Naturaleza ofrecen
posibilidades de trabajo interdisciplinario con objetivos ambientalistas.
En el contexto escolar, además, el
contacto con el medio natural es también contacto con el medio social, dado el
carácter grupal que estas actividades asumen en la Escuela.
En esta perspectiva, la Vida en la
Naturaleza y al Aire Libre contribuye a la construcción de la
autonomía en sus diversos sentidos - corporal, social, moral -
sobre todo cuando la Escuela favorece y promueve la participación de los Alumnos
en las actividades de programación y organización, selección de lugares,
actividades en diferentes entornos desde una vivencia única y en algunos casos,
irrepetible.
La Vida en la Naturaleza y al Aire
Libre se vincula, por otro lado, con el mundo del trabajo. La organización de
actividades de subsistencia implica su distribución racional, sistemática, y de
manera concreta, la disposición de tiempo libre depende de esta organización.
La vida en espacios naturales poco
habituales, donde los hechos y situaciones cotidianas son diferentes, ofrece
experiencias incentivadoras en las que los alumnos/as viven, trabajan, se
recrean y aprenden juntos de manera distinta. El acercamiento a la
naturaleza por medio de experiencias como las caminatas, excursiones, pernoctes
y campamentos tienden al disfrute de la misma. Los desafíos motores que en ella
se presentan, junto con el reconocimiento de sus peculiaridades, abren un
abanico de experiencias y percepciones de gran significado.
Estas experiencias en el medio
natural, promovidas desde la Educación Física, deben ajustarse o adecuarse a
las sugerencias y orientaciones para la enseñanza y la evaluación que se
proponen en las propuestas curriculares de cada institución y/o jurisdicción.
Por esta razón, si bien en cada institución se deben prever los ejes
específicos para abordar los contenidos que ponen el acento en la relación de
los alumnos/as con el ambiente, si se pretende contribuir a la formación
integral de los sujetos también deben considerarse otros ejes y sus contenidos
relacionados.
Además, vale tener en cuenta que
dado el carácter complejo e integral que suelen tener los proyectos que
promueven los aprendizajes en el medio natural, resulta pertinente que en su
elaboración participe un equipo constituido por directivos y docentes de la
institución, promoviéndose la articulación que pueda acordarse con las otras
materias (correlación de contenidos).
Desde un punto de vista más específico, se plantea el acercamiento al ambiente o entorno natural como ámbito indispensable para favorecer la apropiación de saberes y valores que permiten la vida al aire libre. Mediante actividades ludomotrices en la naturaleza, enmarcadas en experiencias de distinta duración –caminatas, grandes juegos, ecojuegos, actividades propias de los espacios naturales, excursiones, etc.–, se brinda a los alumnos/as la oportunidad de desarrollar sus habilidades de desempeño y relación con los otros y con el entorno. A partir de las mismas, pueden elaborarse, aplicarse y aceptarse normas de respeto, cuidado y preservación del ambiente, de seguridad y cuidado de sí mismo y de los otros.